Tanto la extrañaba que ahora no la quería soltar

Y tan desenvuelto e impulsivo como era, se desabrochó la camisa y se acercó a ella.

Lo movilizaba completamente.

La siguió con sus ojos muy fijos por todo su suave cuerpo.

Muy despacio empezó a desabrocharse el cinturón , porque de pronto sintió que le molestaba y no lo necesitaba.

¿Qué importaba si se le caía el pantalón?Estaban ellos dos solos.

Cuando se acercó a la cama se sentó, bajo la vista, respiró hondo y volvió a mirarla.

Se había estado resistendo tantos días.

Con las ocupaciones, el trabajo y el estudio la había dejado de lado.

Pero cómo?!, si ella era su más fiel compañera.

La amaba demasiado como para dejarla más tiempo.

Lo seducía muchísimo como para dejar escapar otra noche.

Muy lentamente estiró los brazos y la fue trayendo para sí.

Cuando puso sus manos sobre ella notó sus marcadas curvas.

Algo se le movió en una zona de su propio cuerpo.

Pasándose una mano por la frente, secándode unas gotas de transpiración, agarró de un cajón unas hojas con acordes y empezó a tocarla.

A ella, su preciada guitarra...

Este post va dedicado a ella,Lunita.(mi guitarra) Que está ahí siempre esperando que la vuelva a tocar.

Hoy dejé a un lado por un momento el libro y pasé la tarde con ella.Posiblemente pasemos la noche juntas tambien.

Chanel.

Tocarlo, abrirlo..Meterme en él.

Temprano, tarde o a cualquier hora.

Día lluvioso, caluroso o con ninguna particularidad.

Me levantaba, a veces deseando que el sueño hubiese sido real, otras, rogando que ese delirio no me visitara nunca más.

Él estaba ahí. A un costado de mi cama.

Siempre estaba ahí. Abierto, para que yo introdujera algo mío en él y él en mi.Aguardando para intercambiar emociones y sentidos.

Él siempre me esperaba. Yo sentía como introducía una fuerza en mi cuerpo. Era el único conducto que me producía tanta excitacion.

Yo comía cada una de sus partes. Lo tocaba, lo acariciaba, lo daba vueltas y lo volvía a tocar.

Él sentía mi piel rozarlo sin parar. Él notaba mis manos meterse en cada hueco en el que pudieran entrar.Conocía mis estremecimientos cuando algo de él me asombraba, y mi transpiración cuando partes suyas me la provocaban.

Lo veía cada vez mas cerca,lo sentía cada ves mas dentro mío. Ya era una parte de mi,ya éramos los dos un mismo cuerpo. éramos uno...

Cuando me desidía suspender ese momento de placer,Cómo deseaba no separarme de él!

Muy suavemente lo retiraba.Pensaba en esas frases dulces que me había susurrado,o esos gritos estruendosos que me había proferido.

Lo cerraba a un lado y lo hacía esperarme. Sabía que no se movería de ahí. Siempre estaba aguardándome para que yo lo abriera y así, él desplegarse sobre mí y transferirme nuevas intensidades.

Cuando esa noche regresé y corrí a su encuentro revolviendo las sabanas: Qué alegría ver que estaba ahí!, listo para ser tocado,abierto y leído.

Cuántas cosas se pueden hacer con un libro! Cuántas revoluciones provocaron a lo largo de mi vida.

Perfumé mis sábanas y cortinas. Me acomodé poniéndolo lo más cerca mío posible, y otra vez...volvimos a ser uno.

Penoso Termómetro

Y estaba en uno de esos momentos donde no sabía si vivía la realidad o estaba inmersa y confundida en uno de esos sueños...

Me levanté,respiré y pensé.

Algo me avisaba que estaba cayendo en esa esfera terrenal que muchos llaman realidad.

Un detonante me dió cuentas.

Un indicador me hizo tomar la verdadera rienda.

Era la tristeza.

Porque volví a sentir ese dolor en el vientre supe..

Porque volví a pegarme en la cabeza y arañarme el cuerpo refleccioné.

Porque sentí esa fina punzada ya no había dudas.

Porque no me gustaba ese nivel, porque no deseaba permanecer en esa esfera y no quería vivirla...

No necesitaba más pruebas.

Si en ese lugar yo no quería estar, me encontraba en el seno de la vida real.

Foto:tomada por Sovka . http://www.el-ojo-blindado.blogspot.com/

Gracias.

La Verdad, será siempre la verdad.

Fría. Cortante como un látigo.

Dura e insencible como un criminal.

Armada de su incomparable fuerza abrazadora.

Punzante y potente destrozadora de conciencias.
Inquebranteble dolor para el engaño ajeno, y, peor aún, para el propio.
Demoledora de fantasías y la ruina del ideal.
Comprime...exorta...choca...desgarra...
Ladrona de imprudencias e impulsos pasionales.

Delatora de la más horrible noticia.

Crónica de novedades impensadas e indeseadas.
Agarra...Sujeta...arrastra...
¿Hacia dónde? ¿Hacia el pozo humeante del infierno?
No. Empuja...cuelga...luego suelta y abandona en la jaula de la realidad.
Para mi, ese destino es aún peor que las primeras llamas.
Pero, ¿ Qué le importa a ella?
No necesita abogado. Ella es el juez.
Sola, altanera y sin amigos: La verdad, será siempre la Verdad.

Escrito en uno de esos momentos donde prefiero la dulce mentira, empalagosa, soñadora, ideal, pero en fín,una inútil mentira.